De Trump a Biden: elementos de una nueva política exterior

Escrito por Imagen: El Periódico Revista Ideele N°295. Diciembre 2020

El pasado noviembre, Estados Unidos eligió a su nuevo presidente, al demócrata Joe Biden, y con ello cambia la dirección de la política exterior estadounidense y, especialmente, el estilo con que se responde a los retos contemporáneos del sistema internacional. En ese marco, este artículo tiene el objetivo de plantear algunos elementos para comprender el futuro de la política exterior estadounidense en la administración Biden, comparándolo con la administración antecesora.

En primer lugar, se debe recordar como terminó Joe Biden la vicepresidencia junto a Barack Obama: en un gobierno que apoyó el Acuerdo de París sobre el cambio climático, que formó parte del acuerdo nuclear con Irán y que impulsó el acuerdo Transpacífico (TTP) para contener la influencia china. Durante la administración Trump se dejaron estos tres espacios multilaterales y, por eso, la elección de Biden implica repensar retomarlos. Con respecto al Acuerdo de París, Biden anunció desde su campaña que lo retomaría y, después de su elección, lo ha confirmado. Muestra de este compromiso es la elección de John Kerry como delegado especial para el Clima, quien, siendo Secretario de Estado de Barack Obama, firmó el Acuerdo de París. Tanto Kerry como Biden han confirmado que van a retornar al pacto y, así, buscarán nuevamente que este país sea un líder en esta temática.

Durante los últimos cuatro años, el gobierno estadounidense decidió dejar de ser el líder del orden que impulsó a instaurar después de la Segunda Guerra Mundial. Ello ha mellado la legitimidad de Estados Unidos y le permitió a China aprovechar los espacios dejados por la administración Trump, como después de abandonar el acuerdo Transpacífico. Para lograr dicho objetivo, Biden enfrentará varios limitantes externos e internos.

En el caso del acuerdo nuclear, Biden ha sostenido en una entrevista a The New York Times que si Irán cumple de nuevo con el acuerdo (y sus límites), Estados Unidos volvería a las negociaciones, se reincorporaría al pacto y terminaría con las sanciones. Aunque Biden reconoce que será difícil lograrlo, tiene claro que encargarse del programa nuclear iraní es necesario para buscar la estabilidad en el Medio Oriente (Friedman, 2020). Esta disposición se expresa en la elección de Jake Sullivan como asesor de seguridad nacional. Sullivan fue negociador en las conversaciones que llevaron al acuerdo nuclear con Irán (Jake Sullivan, Asesor de Seguridad Nacional, 2020), en las cuales también participó Kerry. En este sentido, se espera una estrategia diferente en la región. Además, se debe considerar que, al ser Sullivan asesor de la Casa Blanca, no necesita la aprobación del Senado, evitando conflictos para su confirmación de parte de los republicanos.

Con respecto al acuerdo Transpacífico, el escenario es diferente. China ya firmó un acuerdo con los países que estaban negociando el TTP, dejando a Estados Unidos de lado y consolidando aún más la posición china en el Asia-Pacífico. En ese espacio, lo que intenta hacer Biden es remodelar la estrategia China-EE.UU., con el objetivo de contener la creciente influencia de este país a nivel mundial. Nuevamente Sullivan es una persona clave en esa temática, pues considera expandir el equipo de China en el Consejo de Seguridad Nacional, mostrando la relevancia de este asunto para la nueva administración. En esa línea, Antony Blinken, el elegido como nuevo secretario de Estado, es consciente de que no se puede volver al mundo de hace unos años, lo que toca en este momento es enfrentarse a las transformaciones de los últimos tiempos (Megerian, Chris & Stokols, 2020).

¿Qué nos dicen estos cambios? ¿Qué elementos debemos considerar? En primer lugar, se puede observar una vuelta al multilateralismo para lidiar con los múltiples desafíos globales, como el cambio climático. Esto se muestra asimismo en los nuevos nombramientos, como el de Blinken, un diplomático reconocido, o como el de Linda Thomas-Greenfield como embajadora ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU), quien ha estado más de 35 años en el servicio diplomático, y ha sido subsecretaria de Asuntos Africanos. Este retorno al multilateralismo y a la cooperación es a su vez una gran diferencia con el estilo de Trump, que apostó por el unilateralismo y dejó varios acuerdos (como se mencionó al inicio) e, incluso, se distanció de sus aliados tradicionales.

En segundo lugar, la administración Biden muestra otra gran diferencia con la anterior administración: el perfil de los nombramientos. Es decir, sobresale la diversidad en los nombramientos, la selección de personas con mucha experiencia y la confianza en el conocimiento. Los nombrados tienen más de diez años de experiencia de trabajo en el gobierno y han sido parte del gobierno de Obama.

Esto contrasta con la administración Trump que se caracterizó por el rechazo a la experiencia, como sostiene Elizabeth Saunders. Esto fue, en parte, de esperarse por el tenor populista de Trump. No obstante, antes era impensable que un presidente sin experiencia escoja deliberadamente asesores también sin experiencia en sus cargos. Además, porque pudo haber recurrido a la comunidad de especialistas en seguridad del partido republicano, pero no lo hizo (Saunders, 2018). Considerando esto, los nuevos nombramientos mostrarían un intento de la administración Biden de restaurar la relación con los funcionamientos del Departamento de Estado y diversos diplomáticos que fueron ignorados durante el mandato de Trump (Vásquez, 2020).

Otro rasgo relevante a considerar en el perfil de los nombramientos es la diversidad de los seleccionados. Ello ya se vio durante la campaña al elegir a Kamala Harris como vicepresidenta y se está constatando con las nominaciones. En este contexto, resalta el nombramiento de mujeres en puestos que generalmente han sido ocupados por hombres. Por ejemplo, la economista Yanet Yellen fue nominada como secretaria del Tesoro, y sería la primera mujer en ocupar el cargo. Ella tiene amplia experiencia y ya había roto otro techo de cristal al haber sido la primera mujer en ser elegida directora de la Reserva Federal. Además, ha liderado el Consejo Económico de la Casa Blanca. Otra nominación relevante es la de Avril Haines como directora de Inteligencia Nacional, quien también cuenta con amplia experiencia en el área debido a que fue subdirectora de la CIA y asesora adjunta de Seguridad Nacional. Asimismo, como los demás perfiles, ha trabajado ya con Biden cuando fue su asesora en el Senado (AFP, 2020; Vásquez, 2020).

La diversidad de la nueva administración no solo es de género, sino también étnica. En ese marco, sobresale por su experiencia Linda Thomas-Greenfield (afroamericana) y Alejandro Mayorkas (cubano-estadounidense). Este último sería el primer latino e inmigrante que dirigirá el Departamento de Seguridad Interior. Él ya ha sido director del Servicio de Inmigración y Ciudadanía de Estados Unidos y director adjunto del Departamento de Seguridad Nacional en el gobierno de Obama, sumando más de 20 años de experiencia. El tema migratorio es de especial relevancia debido a las críticas que ha recibido Biden por la cantidad de deportaciones que hubo durante la administración Obama. En ese sentido, el electo nuevo presidente ha propuesto desde su campaña revertir las políticas anti-migrantes (El Plan Biden Para Asegurar Nuestros Valores Como Una Nación De Inmigrantes, 2020). Esta diversidad contrasta con la administración Trump, que desde Reagan fue la que tuvo más hombres blancos: 19 hombres, entre ellos millonarios, y solo cuatro mujeres (Vásquez, 2020).

De esta selección de nominados se puede entrever la decisión de elegir a perfiles políticamente moderados, lo cual podría ayudar a que sean confirmados por el Senado estadounidense (los únicos que no necesitan aprobación de los mencionados son John Kerry y Jake Sullivan). Asimismo, de la selección se puede afirmar la continuidad con la administración Obama. Ello sería positivo para Estados Unidos debido a la experiencia de los nominados y su relación con otros actores internacionales, especialmente los aliados estadounidenses, que fueron dejados de lado más de una vez por Trump. Lo que podría mejorar la relación de este país con actores claves para contener la influencia china. Sin embargo, considerando que estamos en un mundo diferente al de inicios del siglo, la estrategia debe adaptarse a las nuevas transformaciones.

Por último, debe comprenderse la estrategia de Biden a partir del objetivo de retomar el liderazgo mundial (Weaver & Manson, 2020). Durante los últimos cuatro años, el gobierno estadounidense decidió dejar de ser el líder del orden que impulsó a instaurar después de la Segunda Guerra Mundial. Ello ha mellado la legitimidad de Estados Unidos y le permitió a China aprovechar los espacios dejados por la administración Trump, como después de abandonar el acuerdo Transpacífico. Para lograr dicho objetivo, Biden enfrentará varios limitantes externos (el continuo auge de China que se ha consolidado los últimos años) e internos (como el fenómeno político que llevó a Trump al poder y que no ha desaparecido), por lo que no será una tarea fácil.

Bibliografía

AFP. (2020). La economista Janet Yellen podría hacer historia luego de la FED si el Senado la confirma como secretaria del Tesoro. El Financiero, Grupo Nación. https://www.elfinancierocr.com/finanzas/la-economista-janet-yellen-podria-hacer-historia/RYB5UGZEQNC5XC3RH5O3JVJKDM/story/

El Plan Biden Para Asegurar Nuestros Valores Como Una Nación De Inmigrantes. (2020). Joe Biden for President: Official Campaign Website. https://joebiden.com/es/inmigrantes/

Friedman, T. L. (2020, diciembre 2). Opinion | Biden Made Sure ‘Trump Is Not Going to Be President for Four More Years’. The New York Times. https://www.nytimes.com/2020/12/02/opinion/biden-interview-mcconnell-china-iran.html

Jake Sullivan, Asesor de Seguridad Nacional. (s. f.). [Https://buildbackbetter.gov/es/]. Presidente Electo Joe Biden. Recuperado 16 de diciembre de 2020, de https://buildbackbetter.gov/es/designaciones-y-nombramientos/jake-sullivan/

Megerian, Chris, & Stokols, E. (2020, diciembre 11). Biden se enfrenta a un mundo que ha cambiado desde la última vez que ocupó el poder, y no para mejor. Los Angeles Times en Español. https://www.latimes.com/espanol/eeuu/articulo/2020-12-11/en-politica-exterior-joe-biden-no-puede-continuar-donde-el-y-el-presidente-obama-lo-dejaron

Saunders, E. N. (2018, enero 18). Is Trump a Normal Foreign-Policy President? Foreign Affairs. https://www.foreignaffairs.com/articles/united-states/2018-01-18/trump-normal-foreign-policy-president

Vásquez, C. (2020, noviembre 25). Gabinete de Joe Biden: Un equipo ya conocido, moderado y con la marca Obama. France 24. https://www.france24.com/es/ee-uu-y-canadá/20201125-gabinete-biden-blinken-mayorkas-haines

Weaver, C., & Manson, K. (2020, noviembre 24). America is back and ready to lead world, says Joe Biden. https://www.ft.com/content/e9f7fc88-7f08-43af-976c-9b164cf32ed8

Sobre el autor o autora

Mayte Dongo Sueiro
Internacionalista. Doctora en Historia contemporánea de la Universidad Libre de Berlín, con maestría en estudios europeos e internacionales (CIFE, estudios en Niza, Estambul y Berlín) y licenciada en la especialidad de Ciencia Política y Gobierno de la Facultad de Ciencias Sociales de la Pontificia Universidad Católica del Perú. Con amplia experiencia internacional debido a sus estudios y estancias de investigación en lugares como el Parlamento Europeo en Luxemburgo, la Comisión y el Consejo de la Unión Europea en Bruselas. Asimismo, se ha especializado en el área de las relaciones internacionales, tanto en las Ciencias Sociales como en las Humanidades.

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