La guerra hibrida, la nueva guerra del siglo XXI

Escrito por

Revista Ideele N°301. Diciembre 2021

Un nuevo  concepto de guerra  ha surgido en el siglo XXI. Una guerra que prescinde del ataque y la invasión militar. Esta nueva manera de hacer la guerra sin armas ha sido diseñada  por el general Valery Gerasinov, jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas rusas y  está contenida en un documento de unas dos mil páginas que tiene el título de “Guerra Hibrida”, y es conocida en los medios estratégicos como la doctrina  Gerasinov.

Según  la  doctrina Gerasinov  la invasión de cualquier  país es hoy muy cara y produce, contra el invasor, una guerra asimétrica de resistencia que termina siempre en una retirada sin victoria. Mejor es lograr una acción hibrida, es decir, una disuasión militar creíble   mezclada  con acciones   políticas, económicas y cibernéticas  que sirven para orientar a un país  a satisfacer, no sus interesas nacionales,  sino los del país que hace la guerra hibrida.

Para lograr ventajas políticas se compran   políticos y  periodistas. Para buscar dominio económico se compran empresas estratégicas, como son las de energía y plantas purificadoras del agua. También se debe lograr el dominio  del transporte aéreo y marítimo. Y todo esto se acompaña  con fake news a  favor de los partidos  y políticos  que  han apoyado  las compras de empresas estratégicas.

El objetivo fundamental de la guerra hibrida es conseguir con todas estas acciones —políticas y económicas — un lobby  que  trabaje para los intereses nacionales del país que hace la guerra hibrida. Por ejemplo, un lobby que reclame una política pacifista  y se oponga al gasto para modernizar las fuerzas armadas de su propio país. Un lobby  que califique como una  necesidad para el  desarrollo la compra   de empresas estratégicas  por el país que hace la guerra hibrida y que apoye también  inversiones  en zonas fronterizas prohibidas para convertirlas en zonas de influencia territorial del país que ejerce la guerra hibrida.

 Un ejemplo de guerra hibrida  es cómo Rusia  logró  construir un enorme lobby en   los EEUU. Según el bestseller “House of Trump House of Rusia”, los oligarcas rusos han gastado millones de dólares para favorecer la elección de Donald Trump y la relección de senadores republicanos. Solamente el líder republicano del Senado, Mitch MacConnall, según  este bestseller,  habría  recibido dos y medio millones de  dólares. En  Europa, Rusia también ha logrado un lobby  que ha influido para que Alemania, miembro crucial de la OTAN,  acepte en su territorio la construcción de un gran gaseoducto que la hace depender del gas ruso. 

Hoy la más potente arma de la guerra hibrida es el ataque  cibernético.   Según la inteligencia norteamericana, la Casa Blanca, el Pentágono, el Departamento  de Estado y  la Agencia de Seguridad Nacional;  han sido atacadas por hackers, obteniendo información muy valiosa.  Además, penetraron cientos  de empresas privadas y  bancos.  También atacaron plantas de tratamiento del agua, aumentando los elementos químicos  de purificación casi a un nivel de envenenamiento. Y luego al  oleoducto que alimenta de gasolina a toda la costa occidental de los EEUU, desde Texas hasta New Jersey (2, 580 Km).  

La guerra cibernética ya ha comenzado. Según el Instituto Internacional de Estudios Estratégicos de Londres, todos los días, cada hora, cada minuto, hay ataques cibernéticos de tanteo por todo el mundo entre fuerzas armadas que se consideran potencialmente rivales. La intención es saber la efectividad de la defensa nacional de un país rival frente a un ataque a sus sistemas computarizados

 En el caso de conflicto armado, el objetivo del ataque cibernético es lograr una victoria rápida por sorpresa paralizando el poderío militar rival, sobre todo si este es superior. La guerra cibernética es así la nueva ‘blitzkrieg’ (guerra relámpago) del siglo XXI, y por ello, tener capacidad para desencadenar un ataque cibernético o defenderse de este es hoy una necesidad ineludible para toda fuerza armada que se pretende moderna.

Nota: El diplomático Oswaldo de Rivero, autor de este artículo, ha sido nombrado como nuevo embajador peruano en Estados Unidos, hecho que nos parece muy positivo para nuestra política exterior. Publicamos en este enlace la repuesta del presidente Biden a la presentación de sus Cartas Credenciales.

.

Sobre el autor o autora

Oswaldo de Rivero
Diplomático peruano retirado. Autor del libro: "El mito del desarrollo".

Deja el primer comentario sobre "La guerra hibrida, la nueva guerra del siglo XXI"

Deje un comentario

Su correo electrónico no será publicado.


*