Ya dejen de inventar, la subversión no existe más
El tránsito de la guerra a la paz es siempre complicado. García Márquez lo relata bien en “Cien años de soledad” con las correrías del coronel Aureliano Buendía, aquel que promovió 32 guerras civiles y las perdió todas. Lo inédito, en el caso peruano, es que a diferencia de otros procesos de paz en América Latina, Sendero Luminoso decidió, de manera unilateral, dejar las armas.