Asuntos pendientes por aclarar después de 20 años. Pero no entre cualquiera: entre una expareja; pero no entre una expareja cualquiera: entre dos exmilitantes del MRTA. La sospecha y el resentimiento son expulsados en este reencuentro entre Laura y Ramón en un juzgado de Barranco al que asisten para firmar la sentencia de su divorcio.
Una novela poemática o un texto poético-narrativo: “El largo camino de Castilla”, es, sin lugar a dudas La Novela del Bicentenario, y un prodigio de texto donde los 11 mil kilómetros de la feroz Amazonía, fueron cubiertos, a pie, en canoa, a mula y a caballo, por el joven oficial Ramón Castilla que, entonces, deseaba reincorporarse, a las fuerzas realistas.
En marzo pasado, cuando todo cerró, la primera reacción del gremio cultural peruano fue la estupefacción, ¿y ahora qué hacemos?, fue la pregunta que siguió al estupor.
¿Cómo y por qué la propuesta de Sendero Luminoso se convirtió en una opción de adhesión para hombres y mujeres jóvenes principalmente, desde un inicio y sobre todo en el contexto de finales de los años ochenta y comienzos de los noventa?
Han pasado más de 20 años desde la derrota definitiva de los grupos subversivos que protagonizaron la guerra interna en nuestro país, y el fantasma aún no termina de desaparecer.
La semana pasada fue mi primera sesión del curso Historia de la república en la PUCP y en un esfuerzo por definir nuestra realidad política, que no puede separarse de la socioeconómica, volvió a surgir el imaginario de la herencia colonial y, con él, el de los insalvables abismos culturales.
La niebla es aquello que nos nubla, que no nos deja avanzar. Una capa que oculta nuestra visión. Pero aunque haya niebla en el camino, aún podemos escuchar.
Hace algunas semanas aparecieron en Facebook unos comentarios sobre la presentación de mi libro Sobre héroes y víctimas. No sobre el libro sino sobre algunas palabras mías en la presentación.
El director noruego Egil Håskjold Larsen fue galardonado como mejor cineasta emergente en la pasada edición del prestigioso festival de cine documental de Toronto, HotDocs, por su cinta 69 minutos de 86 días, queretrata el drama de los refugiados sirios a través de los ojos de una niña de tres años. Håskjold Larsen conversó con Revista Ideele en Toronto.
Meticuloso, parsimonioso y muy correcto al hablar. Buscador del término exacto siempre. Si fuera por él, se pasaría la vida contando historias. No sabemos cuántas ha contado en 84 años. Escucharlo se convierte siempre en una clase en la que introduce, expone, explica y pone ejemplos. Casi un monólogo, pero bien alejado de las tinieblas.
En las últimas semanas, dos buenas películas peruanas, de las mejores que se han producido en el país en los años más recientes, se vieron obligadas a dejar la cartelera cinematográfica sin haber podido llegar a más espectadores luego de sus esperado estreno, y como lo merecían.
En la castigada Siria, las bombas no cesan de caer. En Europa occidental, el terrorismo sigue haciendo historia. Es por eso que el festival internacional de cine documental HotDocs de Toronto dedicó una sesión a la guerra en Siria, cuyas escenas e imágenes del conflicto dejaron al público en fúnebre silencio.
El largo camino de Castilla presenta una estructura tripartita, que lejos de acomodarse a un esquema tradicional, se escora decididamente hacia una forma circular, con una evidente vocación mítica.
Si de años catastróficos hablamos, el 2020 se lleva el mayor premio. Un año atípico en todos los aspectos de la vida y como tal el fútbol no fue la excepción.
La corrupción consiste en el abuso del poder para beneficio propio y no se restringe únicamente a obtener utilidades económicas; también puede clasificarse de corrupción a gran o menor escala política el servirse de la autoridad que emane del gobierno central, regional o local. En el caso al que me referiré se trata del uso del patrimonio cultural en aprovechamiento propio o grupal.
Este año se cumplieron 50 años de la aparición de la primera revista del movimiento Hora Zero, que constituye el inicio de la última vanguardia de la poesía peruana.
Tenía 18 años cuando conocí a Jesús Vásquez, “La Reina y Señora de la Canción Criolla”. Un gran epíteto para una persona que toda su vida se caracterizó por su sencillez y calidad humana, pero lo tenía bien ganado.
Todas las canchas de futbol profesional y amateur, todas las canchas de césped, todas las canchas de loza o de gras sintético, todas las canchas de tierra aplanada o no tan bien aplanada, todas las canchas imaginables están de duelo.
El documental español El Silencio de los otros, dirigido por Almudena Carracedo y Robert Bahar, se centra en la historia de miles de víctimas de la dictadura franquista y de su lucha contra la impunidad.
Conocí a Mario Vargas Llosa hace cerca de cincuenta años en Arequipa, durante mis primeros ciclos universitarios a principios de los setenta en un pequeño teatro llamado Aquelarre, donde dictó una conferencia sobre su libro ‘García Márquez: Historia de un deicidio’. A mi hermano Jorge y a mí nos llevó mi padre, quien trabajaba con Jorge Cornejo Polar en la Universidad de San Agustín, que organizó el evento. Me di con la sorpresa de un excelente expositor que resumió con brillantez esa monumental obra crítica, quizá la mejor que se ha escrito sobre el escritor colombiano.
A ciencia cierta, nadie sabe cómo se pronuncia fonéticamente el nombre de Cthulhu, un ser gigantesco y cósmico de cabeza pulposa que descansa en R’lyeh, una ciudad sumergida en las profundidades del Océano Pacífico. Nadie que sea humano conoce los decibeles e inflexiones extraterrestres que se requieren para designarlo correctamente. Nadie, excepto su creador, el escritor estadounidense de terror y ciencia ficción Howard Phillips Lovecraft, o mejor dicho su mente fantástica. En realidad…él tampoco lo sabe.
Durante estos meses, marcados por la pandemia desatada por la COVID 19, se han desarrollado en nuestro medio una serie de intervenciones, eventos y comentarios de diferente índole.
Es muy probable que el republicanismo –en tanto “tradición política” que constituye “una sólida base” para “consolidar la democracia, fortalecer la gobernabilidad y promover la cohesión social”[1]—sea uno de los conceptos más utilizados en la campaña electoral ad portas.
Alicia Maguiña ha partido ad portas de cumplir 82 años. Una intensa vida dedicada en su mayor parte a la vocación por la música, cuestión que tuvo bien clara desde muy temprana edad. Quienes la hemos conocido de manera directa sentimos una doble pérdida, no solo como una figura destacada de la música peruana, sino como una maestra y amiga. Resultaría inútil pedirle explicaciones a la muerte, pero no deja de sorprender que se haya marchado justo cuando venía trabajando en un segundo libro destinado a recoger parte de sus memorias y vivencias con el arte popular.
El poder de las humanidades, al interior de los sistemas del conocimiento y su necesaria concordancia con los sistemas sociales y políticos, radica en un hecho fundamental: permite la elaboración de un pensamiento complejo, capaz de comprender los procesos y hechos del mundo en su diversidad e interconectividad. En una época que se caracteriza por la aleatoriedad y la fractalidad de la estructura sociocultural y sus múltiples interrelaciones (hasta el límite de lo observable), se hace manifiesto el imperativo epistemológico de reincorporar los estudios humanos y sociales en la organización sistémica del conocimiento.
En este ensayo pregunto: ¿Debe el futuro MUNA, el nuevo Museo Nacional del Perú, ser concebido como un derecho cultural? Y mi respuesta es un inequívoco sí: porque el museo nacional, a diferencia de museos locales, regionales, y museos privados, tiene como objetivo ser una institución “paraguas” en las que todos los sectores de la población de todas las regiones del país tienen el derecho a ser representadas y tienen el derecho de observarse entre ellas; este museo sería un mosaico de la sociedad nacional del pasado, del presente, del futuro, de la costa, de la sierra y selva y para usar un término familiar, de los cuatro suyos de Perú. Es necesario entonces precisarlo: el carácter de derecho cultural del museo nacional reside en que es representativo, retrospectivo, inclusivo, argumentativo, contemplativo pero a la vez visionario, y con una mirada global observando el mundo ancho y ajeno en el que languidece el patrimonio exiliado peruano.
Hot Docs, el festival de cine documental de Toronto, arrancó este año días después del sorprendente suicidio del ex presidente Alan García Pérez, cebándose curiosamente en un par de tremebundas experiencias peruanas. Máxima, el documental dirigido por la peruana Claudia Sparrow, ofrece una versión edulcorada del vergonzoso hostigamiento experimentado por la campesina cajamarquina que supo plantar cara a las mineras Newmont y Buenaventura, impidiendo hasta la fecha la explotación aurífera en Conga.
La casa donde nació Túpac Amaru II, enclavada en un recodo de los Andes, flota a lo lejos en un desfiladero del río Apurímac, y por las noches los truenos caen en el poblado de Nuestra Señora de la Purificación de Surimana, en Cuzco.
El Perú es un país lleno de historias sin contar, existen miles de magníficos y necesarios relatos que no tienen un soporte visual. La reforma agraria es —qué duda cabe— uno de ellos. No es de sorprender, entonces, que un documental como el que ha dirigido Gonzalo Benavente haya despertado el interés de los medios y el público.