¡Lo que se viene!

En 2014, el Gobierno del presidente Humala enfrentará una serie de riesgos marcados por el complejo escenario político en el que el país se balancea. Sin embargo, lo que ocurra en esos escenarios, y ésa es la preocupación, estará marcado por la debilidad del régimen, debilidad que parece estar marcada en su propio ADN. Miremos los escenarios; luego, veamos esas debilidades.
El caso Óscar López Meneses. La crisis política de él derivada no ha terminado. La investigación fiscal sigue su camino propio y la congresal apenas comienza. Muy importantes serán sus conclusiones, pero no menos relevante resultará la forma cómo se conduzca el grupo de trabajo. El Gobierno deberá acometer, a medida que el proceso avance, un enorme esfuerzo en materia de gestión de daños.
El caso OLM ha dañado ya la credibilidad presidencial. Según DATUM, más de la mitad de los encuestados (60%) no cree que el Presidente haya estado al margen del irregular resguardo policial. En ese sentido, este caso no ha permitido mejorar la aprobación a la gestión gubernamental aprovechando el empuje que hubiese podido darle el ingreso a la PCM del premier Villanueva: 6 de cada 10 encuestados por DATUM desaprueban la gestión presidencial.
Por el lado de la oposición continuarán los ataques del fujimorismo —que no termina de encajar el golpe de la negativa del indulto, y cuyo líder en prisión querrá seguir con sus pataletas telefónicas—. Por el lado del APRA, mientras dure el trabajo de la “megacomisión” y exista la mínima posibilidad de sanción política que devenga inhabilitación al expresidente Alan García, la hostilidad de sus huestes será una constante. En un año preelectoral, ambas organizaciones, cuchillo en la boca, serán un auténtico dolor de cabeza para el régimen.
El escenario de una inseguridad ciudadana creciente y rampante, y de complejo abordaje, es una auténtica papa caliente por lo que significa en el día a día de las personas, en el debilitamiento del tejido social y en la percepción de hombres y mujeres de una escasa respuesta al problema por parte del Ejecutivo.
La televisión seguirá mostrándonos imágenes de robos y asaltos tomadas por las miles de cámaras instaladas en todas las ciudades, en miles de locales; imágenes que nos proveen de un nuevo reality que impregna todo de temor y que evidencian la poca capacidad de respuesta desde las instituciones, salvo ejemplos muy específicos. Está de más mencionar la enorme preocupación por las informaciones que provienen de algunas ciudades donde la delincuencia se ha instalado con una permisividad sorprendente y en las que han aparecido grupos parapoliciales que, violentando todo ordenamiento jurídico, están “haciendo justicia” por propia mano. Solo en noviembre fueron abatidos 17 delincuentes en las calles de Cañete (Lima); algunos dedicados a la extorsión, otros exreclusos. Sus muertes se habrían producido a manos de policías. El apoyo de la población a la actuación de estos grupos es muy alto. Éstos son algunos ejemplos aparecidos en la versión on line del diario La República cuando se publicó esta noticia, y que reproducimos literalmente:
yony:
Me parece correcto que se haya tomado esta decisión, estos delincuentes ya no creen en nadie, inclusive niños son los puntos blancos... ojalá lleguen a Chincha ya que también han aumentado los secuestros y las violaciones a niños.
sagitario:
Felicitaciones a estas personas que hicieron esto, a ver si también desaparecen a los ladrones con terno como los congresistas y tanta gente que da mal ejemplo y los llaman padres de la patria dan asco.
fernando avila:
Bueno ante la ola de extorsiones secuestros y muerte a manos de estos estos delincuentes, ya era tiempo que alguien tomara la iniciativa de salirle al frente [...].
caballeros templarios:
Espero que continúe el apoyo de la población para acabar con toda esta lacra sigan escribiendo.
Atte. Caballero templario
joshua l.:
No apoyo la muerte, pero son las consecuencias! Así que si no quieren morir dejen de robar y pónganse a trabajar!! Y de abusar de la nobleza de la gente honrada!!!
lider:
Estoy seguro de que otros seguirán su ejemplo. Congratulaciones.
loner:
No queda más opción, que sigan así, ese comando debe recorrer todo el país y dar vuelta a todos esos ladrones [...].
luis:
Qué lástima que tenga que ser así pero es la única manera de poder vivir tranquilos […].
marco antonio:
Es la única manera de parar la delincuencia.
javiervvv:
Felicitaciones a ese escuadrón por actuar frente a esa situación, denles los que se merecen.
julio:
Es una lástima llegar a este extremo, pero es muy necesario, el poder judicial no hace nada […].
josse:
Ya era hora de eliminar a todas esas lacras, ahora que empiecen con los corruptos mis felicitaciones.
pepe:
Salí de cañete porque hay mucho enfermo o sea MUCHO DELINCUENTE... Me da gusto que alguien tenga el coraje de eliminar las basuras de cañete [...].
alexxx:
Qué bueno.... ya era hora de liquidar esas lacras... Felicitaciones... APLAUSOS Y MAS APLAUSOS...
manuel:
Dónde hay que inscribirse para unirse a ese grupo de héroes?? felicitaciones y sigan así dejen limpio el Perú.
luis:
Felicitaciones, cómo puedo ayudarlos tengo experticia en telecomunicaciones, y en sistemas de vigilancia electrónica.
chepenano:
Buena iniciativa ante tanto policía corrupto y delincuente. Dense una vuelta por Chepén, que aquí hasta la policía está metida.
daid:
Cómo hago para unirme a estos héroes de la sociedad?????
asiano:
Maten a todos esos ladrones y vayan también a los paraderos de bus donde andan los “cogoteros”.
Ésta es una preocupación de primer orden.
La sentencia al ex presidente Fujimori abrió una pequeña ventana de esperanza en la lucha contra la impunidad y la corrupción
Todos esos escenarios en los que el Gobierno se tendrá que desenvolver en el 2014 están atravesados por la corrupción institucional y por la alta percepción ciudadana de ésta. “¿Puede esta Policía enfrentar a la delincuencia cuando ella misma está apolillada por la corrupción?”, se preguntan con razón los ciudadanos. ¿El Poder Judicial podrá cumplir con sus labores en temas de seguridad ciudadana, por ejemplo, cuando es percibido como el poder del Estado más corrupto? Y el INPE, ¿podrá hacerlo? ¿Y el Ministerio Público? Una corrupción que mella permanentemente los esfuerzos, que no son pocos y sí de muchos, por fortalecer la institucionalidad democrática en el país. Éste no es, además, un problema menor: es, quizá, el problema.
La sentencia al expresidente Fujimori abrió una pequeña ventana de esperanza en la lucha contra la impunidad y la corrupción. En ese sentido, es importante destacar que no había precedente de algo así en nuestra historia republicana, y ésa fue una luz en medio del lóbrego paisaje de baja institucionalidad en el que un hermano del Presidente de la República y un hermano de un vicepresidente, Omar Chehade, aunque éste renunció al cargo, están en prisión. Esto ¿qué significa? Una mirada positiva podría dar como resultado que estamos ante un espacio de fortalecimiento institucional, frente a un Estado que busca que su equilibrio de poderes responda eficientemente y, en ese marco, se aplica el principio de igualdad ante la ley. Una mirada positiva, entonces, entendería que no se estarían usando los mecanismos, los resortes de la corrupción y del mal uso del poder, para vulnerar el sistema legal y brindarles a ambos reos ventajas o prebendas frente a otros presos del país.
Sin embargo, también hay que precisarlo, miradas más escépticas señalan que el que Humala no pueda hacer nada por su hermano Antauro, ni Omar Chehade por su hermano Miguel, evidencia que el Presidente, y el Gobierno en general, es incapaz de mover un solo hilo desde el espacio del poder.
Todo lo anterior representa una serie de problemas que el Gobierno deberá enfrentar en el 2014. Pero es éste un Gobierno desarmado para enfrentar escenarios complejos, principalmente por cuatro debilidades:
a.Los cuadros del partido de gobierno son escasos, con poca experiencia, con operadores con juego político pobre y mirada cortoplacista. El pobre planteamiento de ideas en el debate político nacional de su bancada en Congreso es una clara evidencia de esta precariedad. Brunner, politólogo chileno, señaló a inicios de la década, con buen criterio, que para gobernar bien un país se necesitaría por lo menos 5 mil personas o cuadros políticos eficientes. Hablaba desde la experiencia chilena, un país evidentemente más institucionalizado que el nuestro. ¿Tiene el Gobierno de Humala cuadros suficientes, diestros en política, eficientes en gestión para enfrentar un año complejo? Tengo la sensación de que en el humalismo no debe de haber más de 200.
b. Para emprender algún nivel de cambios de fondo, que no signifique parches ni pinturas decorativas en la vida social peruana, en cualquiera de sus puntos más urgentes (educación, seguridad, salud) se requiere de una base social, de un apoyo político de importantes sectores ciudadanos, con capacidad de movilización, que arropara ese esfuerzo. Esa base social no existe, desapareció en el mismo tacho que se esfumó la “Gran Transformación”. Es cada vez más claro y evidente, para nuestra tristeza, que éste no es un Gobierno transformador; no tiene la vocación, no tiene la pericia. Por ello, el desencanto que representa es aplastante.
c. Un tercer elemento, que marca la debilidad del Gobierno para moverse en escenarios complejos, es la propia personalidad del Presidente. Por momentos deprimido, recluido o ausente, incapaz de gobernar como sus padres esperaban que lo hiciera cuando de niño le decían que él debía ser Presidente (según testimonio de su madre). Parece haber sido cooptado con facilidad, por ejemplo, por sectores empresariales. No son pocos los comunicados “confepianos” de apoyo a la labor gubernamental frente al miedo que algún estado de ánimo nublado termine por hacer aflorar el lado más chavista de Ollanta Humala.
d. Finalmente, Nadine Heredia. La mirada que desde la oposición, o desde los medios, o desde la población, se tiene de ella, no fortalece la posición política del Presidente; por el contrario, la debilita. La popularidad de Heredia es mayor que la de Humala, según las encuestas. Dentro de su partido, y a partir de su militancia, ella tiende a precarizar la posición ya de por sí débil de su esposo, más aún cuando dentro del nacionalismo ella encarna la posibilidad de regresar al poder en el futuro. (Humala, creemos, no pisará, tras su gobierno, nunca más la casa de Pizarro.) Ella representa la posibilidad de regresar en algún momento al poder, y en ese contexto estar cerca de ella podría significar estar en un nuevo banquete.